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Trujal Mendía de Arróniz

El trujal "Mendía" de Arróniz se fundó en 1992 gracias a la asociación inicial de 22 y poco después 27, antiguos trujales de la Zona Media de Navarra. La mayoría de ellos radican en la comarca de Tierra Estella. En el año 2012 cuenta con más de 4.500 socios. Se dice que es el trujal más representativo de Navarra puesto que concentra más del 50% de toda la producción de aceite navarro. A este gran centro llegan los frutos procedentes de 900.000 olivos que ocupan unas 2.800 hectáreas en multitud de municipios cercanos. La mayoría son explotaciones pequeñas que no alcanzan la hectárea de superficie con cultivos poco mecanizados. Algunas de las plantaciones más recientes incorporan el riego por goteo de sus olivos.



La producción media anual que llega al trujal Mendía de Arróniz se cifra en 2 millones de toneladas de olivas con resultado de 1.500 toneladas de aceite. La campaña 2005-2006 marcó una cifra récord de 7,66 millones de kilos de olivas recolectadas. A partir de entonces se ha registrado una cosecha con tendencia a la baja. En 2009-2010 se ordeñaron 7,4 millones de kilos de olivas que dieron 1.710 toneladas de litros. En 2010-2011 fueron 6,2 millones de kilos para 1.300 toneladas de aceite, si bien afortunadamente en la temporada 2011-2012 se ha conseguido aumentar la recolección a 6,5 millones de kilos. La recuperación parece estribar, entre otros factores, en las lluvias invernales y, sobre todo, en el buen tiempo sin heladas durante las tareas de recogida. Ello ha permitido una recolección tranquila, una maduración escalonada de las distintas variedades de olivas y una conducción más directa y ordenada de todas ellas al trujal.

La planta centralizadora de Arróniz recibe un 90% de olivas de la variedad autóctona denominada precisamente "arróniz" y el resto de arbequina. Pero en los últimos tiempos análisis más precisos han determinado las siguientes proporciones: 80% variedad arróniz, 15-10% arbequina y 10-5% empeltre, picual, negral y otras. La primera de todas ellas se caracteriza por un ciclo vegetativo corto, bien adaptado al clima navarro ya extremo para el olivo y con un gran número de antioxidantes vegetales que imprimen vida y carácter al néctar de oliva obtenido.

Las instalaciones del trujal Mendía son modernas y se encuentran equipadas con una tecnología que permite un proceso de obtención del zumo de aceituna totalmente mecanizado. Ocupan cerca de 1.200 m² perfectamente soterrados en el paisaje para su mejor integración en el medio ambiente. Cabe destacar los seis grandes depósitos con capacidad para 120.000 litros, ampliables en caso de necesidad en otros tantos depósitos, así como el laboratorio donde se presta especial atención tanto a la calidad de la oliva entrante como a la del aceite saliente. A lo largo de todo el proceso de obtención del oro líquido también se controla muy de cerca el rendimiento graso de la materia prima. El producto final agradece mucho el trabajo de la batidora dotada de una entrada de agua templada para mantener la pasta por debajo de los 27ºC. A esa misma temperatura también opera el llamado "decanter" o centrífuga horizontal para separar el aceite del alperujo desechable. Finalmente la centrífuga vertical reduce al máximo las impurezas y restos de agua, quedando un aceite de máxima calidad, listo para decantarse en la bodega, envasarse y consumir.

El aceite obtenido en el trujal cooperativo Mendía de Arróniz disfruta del sello de calidad que ofrece la Denominación de Origen Protegida Aceite de Navarra Virgen Extra. Se trata de un producto complejo, equilibrado y aromático, ideal para todo tipo de ensaladas, verduras y guisos. El color es dorado o verdoso, de aspecto denso y aroma perfumado con un frutado medio-alto que incluye ligeras notas amargas y picantes. Además del de Arróniz, dentro del sello "Aceite de Navarra" encontramos la producción de hasta siete trujales: Agrícola La Maja, La Casa del Aceite, Trujal Artajo, Almazara del Ebro, Hacienda Queiles y Urzante. El 26 de febrero de 2012 se celebró en Arróniz la duodécima edición del Día de la Tostada. En la misma localidad se puede visitar el "Museo del Aceite" de la empresa Ékolo, donde se pone de manifiesto la importancia del olivar y del aceite en la Zona Media de Navarra y se recrea la maquinaria de un trujal que estuvo operativo desde fines del siglo XIX hasta los años 60 de la centuria siguiente.