Lexikoa

PEZ

k) Los perciformes. Los Perciformes son uno de los principales grupos de peces marinos, tanto por el número de familias diferentes que se incluyen en él, como por la importancia económica de algunas especies. Entre las principales familias citaremos los Serránidos como el Mero Epinephelus guaza (L. 1758), la Cherna Polyprion americanus (Schneider, 1801) y de menor tamaño el Serrano Serranus scriba (L. 1758) y la Cabrilla S. cabrilla (L. 1758) los Morónidos están representados por la Lubina Dicentrarchus labrax (L. 1758) y la Lubina moteada D. punctatus (Bloch, 1792). También pertenecen a los Perciformes familias como los Epigónidos o Peces telescopio Epigonus telescopus (Risso, 1810) de enormes ojos adaptados a las profundidades, o los Cepólidos como la Cinta colorada Cepola rubescens L. 1766. De mayor interés económico los Carángidos presentan especies como el Jurel Trachurus trachurus (L. 1758) y T. mediterraneus y el Chichamo T. picturatus (Bowdich, 1825). Estos peces viven unas veces cerca del fondo donde son capturados con artes de arrastre y en otras épocas cerca de la superficie donde son objeto de la pesquería pelágica. Su carne, a pesar de las recientes campañas de márketing, no es aún muy apreciada y buena parte de las capturas se destinan a la fabricación de harinas de pescado que son utilizadas como piensos. La Palometa negra o Japuta Brama brama (Bonnaterre, 1788) es capturada y consumida en ciertas épocas del año y más rara en nuestras aguas, la Llampuga Coryphaena hippurus L. 1758, pasa por ser uno de los más voraces depredadores del océano. A la familia de los Esciénidos pertenecen la Corvina Argyrosomus regius (Asso, 1801), el Corvallo Sciaena umbra L. 1758, y los Verrugatos Umbrina cirrosa (L. 1758) y U. canariensis Valenciennes, 1843. La familia Mullidae incluye los Salmonetes de roca Mullus surmuletus L. 1758 y de fango M. barbatus (L. 1758) apreciado manjar ya en la antigüedad clásica. Una de las familias que presenta un mayor número de especies es la de los Espáridos entre los que destacaremos el Besugo Pagellus bogaraveo (Brunnich, 1768) hoy en día en franca regresión en nuestras aguas por causas desconocidas; especies similares son el Aligote P. acarne (Risso, 1826) y la Breca P. erythrinus (L. 1758). En las aguas litorales abundan las especies del género Diplodus conocidas como Musharras y objeto principal de ciertas modalidades de pesca deportiva. A la familia de los Espáridos pertenecen además la Boga Boops boops (L. 1758), el Dentón Dentex dentex (L. 1758), la Erla Lithognathus mormyrus (L. 1758), la Oblada Oblada melanura (L. 1758), el Pargo Pagrus pagrus (L. 1758) y la Salpa Sarpa salpa (L. 1758). Los Lábridos son una curiosa familia de peces litorales donde las fases juveniles son hembras y los adultos, de colores más vivos, machos. Entre las especies más comunes en nuestro litoral podemos citar la Doncella Coris julis (L. 1758) abundante en fondos arenosos, la Maragota o Durdo, Labrus bergylta Ascanius, 1767, el Chiribito L. bimaculatus L. 1758 y la Porredana Symphodus melops (L. 1758) todos ellos de vivos colores y con un marcado dimorfismo sexual. Los Amodítidos o lanzones son peces de cuerpo alargado que viven en fondos arenosos donde se entierran a la menor señal de peligro, la especie más frecuente de Lanzón en nuestras playas es Hyperoplus lanceolatus (Le Sauvage, 1824). Los Traquínidos son peligrosos peces provistos de radios y aguijones operculares venenosos, se entierran en la arena dejando fuera los ojos y en nuestras aguas viven las especies de Xabirones Echiichthys vipera (Cuvier, 1829) y Trachinus draco L. 1758. Dentro de los Gempffidos, el Escolar Ruvettus pretiosus Cocco, 1829, es ocasionalmente capturado con anzuelo de fondo y su carne muy grasienta es poco apreciada. Los Triquiúridos de cuerpo alargado y aplanado, con aspecto de cinta y fuertes dientes que les confieren un feroz aspecto, están representados por las especies Sable negro, Aphanopus carbo Lowe, 1839, el Pez cinta Lepidopus caudatus (Euphrasen, 1788) y el Sable Trichiurus lepturus L. 1758. Los Escómbridos constituyen una familia de peces pelágicos muy apreciados entre los que citaremos el Bonito del Norte Thunnus alalunga (Bonnaterre, 1788) y el Cimarrón Thunnus thynnus (L. 1758) existiendo otras especies que son objeto de una activa pesquería, a veces en mares muy lejanos, por la flota bermeana de atuneros congeladores. La Caballa Scomber scombrus L. 1758 y Estornino S. japonicus son especies que posiblemente constituyen la más antigua pesquería industrial del País Vasco. En efecto, en fecha reciente se han hallado en Guethary depósitos romanos para fabricar el famoso «garum», condimento apreciadísimo elaborado con estos pescados y que presumiblemente constituye la primera referencia histórica de una pesca «preindustrial» en Euskaherria. De curioso aspecto, el Luvaro Luvarus imperialis Rafinesque 1810 ha sido citado en la costa vasca. Los Istiofóridos o peces vela son muy raros en nuestras aguas, si bien ocasionalmente ha sido capturado algún ejemplar. También raro, pero más frecuente que los anteriores, el Pez espada Xiphias gladius L. 1758, llamado más frecuentemente Emperador, tiene un inconfundible aspecto con el rostro terminado en una larga defensa dura que asemeja a una espada y que le sirve para la defensa y el ataque. Los Góbidos constituyen una familia de pequeños peces que son frecuentes sobre todo en fondos arenosos o fangosos y presentan soldadas a modo de ventosa las aletas pelvianas. Existen numerosas especies desde el intermareal hasta el talud continental y algunas de ellas son difíciles de distinguir. Tienen un interés indirecto ya que estos pececillos constituyen parte importante de la dieta de otras especies comerciales. Más vistosos, los Callionímidos, Dragones o Lagartos presentan unas grandes aletas vistosamente coloreadas que no son sino un aviso de su peligrosidad, en efecto las espinas operculares de estos peces son venenosas y están curvadas como garfios. En nuestras aguas encontramos las especies Callionymus Iyra L. 1758, C. maculatus Valenciennes 1837 y C. reticulatus Valenciennes, 1837. Los Blénidos, Babosas o Kabuxas son un interesante grupo de peces litorales: salvo la Babosa ocelada Blennius ocellaris L. 1758 las restantes especies viven en la zona litoral, siendo la costa vasca, por su fuerte grado de exposición al oleaje y por su carácter cálido, rica en especies. En la zona alta del intermareal encontramos Coryphoblennius galerita (L. 1758). Pececillo muy frecuente en las cubetas, se alimenta de cirrípedos y puede pasar «en seco» varias horas. Más abajo encontramos las especies Blennius trigloides (Valenciennes, 1836), B. pholis (L. 1758), B. sanguinolentus (Pallas 1811) y B. gattorugine Brünnich, 1768. Las especies B. incognitus Bath, 1968, y B. pilicornis Cuvier, 1829, fueron encontradas recientemente en la costa vasca por vez primera en el Atlántico europeo. El Tripterigio Trypterygion delaisi Cadenat & Blache 1971 vive también en la zona intermareal y submareal en fondos donde se alterna la roca con la arena. Los Ofídidos están representados por el Ofidion, Ophidion barbatum L. 1758, y entre los Centrolófidos encontramos el Schedophilus medusophagus Cocco, 1839, que como su nombre indica consume medusas y el Centrolophus niger (Gmelin, 1788) que prefiere pequeños calamares y crustá ceos planctónicos. Otro pez que se alimenta de medusas es el Tetragonuro o Cola cuadrada Tetragonurus cuvieri Risso 1810 y dentro de los Esfirénidos la temible Barracuda Sphyraena sphyraena (L. 1758) es raramente capturada en nuestras aguas. Finalizaremos este largo grupo de peces Perci formes con los Mugtlidos, peces ramoneadores que forman densos cardúmenes en las desembocaduras de nuestros ríos, el más popular es el Corcón Chelon labrosus (Risso, 1826), si bien existen especies como la Lisa o Dabeta Liza aurata (Risso, 1810), el Capitón o Daplata L. ramada (Risso, 1826), la Galúa L. saliens (Risso, 1810) y el Mujol o Bullua Mugil cephalus L. 1758.