En el siglo XVIII. En el año 1704 Gordejuela contaba con doscientos diecinueve hogueras, según se desprende de un fogueramiento efectuado en todo Vizcaya en el citado año. Este fogueramiento fue decretado por la Junta General del Señorío con fecha 28 de junio, a fin de poder hacer los repartimientos de los gastos generales del señorío. [Labayru, HGSB, t. VI, p. 26.] Gordejuela y otras localidades de las Encartaciones se vieron privadas de voto en las siguientes elecciones del Señorío, por medida tomada el 2 de julio de 1738 por la Junta General del Señorío, ya que no abonaban quince mil reales que adeudaban. La Junta decidió también que si los pueblos afectados pagaban en el plazo de dos meses, se les compensaría dándoles doble voto en las elecciones de 1740. Pero, en esta fecha (Labayru, HGSB, t. VI, p. 211), se separó, junto con el resto de las Encartaciones, hasta 1799, del Señorío. El 22 de enero de 1766, el alcalde y juez ordinario de Gordejuela, D. Francisco Antonio de Murga, firmó un curioso bando de 29 capítulos, en el cual se aprecia las diligencias de tal autoridad en beneficio del valle. En este valle había, en 1790, 2 escribanos numerales. [Ref. E. J. L.: "H. G. S. B.", t. VI, pp. 367, 524, 706-707]. Pero en las Juntas Generales de Guernica, celebradas en el mes de julio de 1800, se estableció que en esta localidad hubiese un solo escribano. [Ref. E. J. L.: "H. G.. S. B.", t. VI, pp. 367, 524, 706-707].