Sailkatu gabe

Gipuzkoa. Historia (1984ko bertsioa)

Fratricidio de Peñalén (1076).

Desmembración del reino vasco de Pamplona. División de Guipúzcoa en el reparto. Una vieja conspiración, alimentada desde fuera del Reino, da su fruto en el fatídico año 1076. Los hermanos Ramón y Ermesenda asesinan a D. Sancho, su hermano, haciéndole caer de un empujón al barranco de Peñalén, cerca de Funes. El suceso conmovió a todo el Reino. Los infantes fratricidas son públicamente repudiados. Levantan milicias para hacerse con el poder, pero el pueblo armado les echa del Reino y huyen, Ramón a la corte del rey moro en Zaragoza y Ermesenda a la corte de Castilla. Mientras los vascos luchaban contra los infantes, los ejércitos del rey Alfonso de Castilla caían sobre el reino vasco ocupando la Bureba y la Rioja. Sus cómplices, el señor de Vizcaya y de Nájera, el guardián de Montes de Oca y el de Bilibio, echaban voces de que el monarca castellano venia en plan de vengador del infame asesinato. Unas semanas después del suceso estaba ya el invasor en Calahorra. La familia real, contagiada de aquella generosidad atribuida al castellano, le recibe en Nájera como a pariente y amigo. No vino a restaurar sino a apoderarse del Reino. Y se hubiera hecho dueño absoluto de no intervenir el rey D. Sancho de Aragón que se apresura a entrar militarmente en la capital, en Pamplona misma. Todo tuvo lugar rápidamente en el mes de julio. Pero los castellanos habían llegado a ocupar incluso Puente la Reina y Sangüesa. El aragonés no tarda en proclamarse rey en Pamplona jurando guardar los fueros y leyes. El castellano, temeroso de un enfrentamiento, se queda con la mitad occidental del Reino en la que se incluye a casi toda Guipúzcoa que, desde ese momento, se convierte peligrosamente en fronteriza de la mitad oriental adherida a Sancho Ramírez de Aragón. Es bien sintomático que en Nájera se exigiera al rey Alfonso, antes de jurar el fuero, el juramento de no haber tomado parte en el asesinato del rey. Y ahora, como al señor de Vizcaya, Lope Iñiguez, se le desposee de Nájera, se le da en compensación los señoríos de Alava y Guipúzcoa. Don Alfonso se va a titular en adelante rey de Castilla, de León y de Nájera. D. Sancho Ramírez se titulará rey de Aragón y de Pamplona renunciando a la mitad occidental del Reino por inferioridad de poderío bélico. Hubo, no cabe duda, cambio de señores, perdiendo sus señoríos Orbita Azenariz de Guipúzcoa y Marcelo de Alava, pero no así el de Vizcaya, que andaba dentro de la conspiración. Se vislumbra la oposición de guipuzcoanos y alaveses. La Guipúzcoa vascona, aquélla extendida entre el Urumea y el Bidasoa, seguía con Pamplona. La desmembración del reino vasco duró desde 1076 a 1112, año en que se restaura la unidad del Reino gracias a circunstancias excepcionales.