Toponimoak

Estados Unidos de América. Nevada

La inmigración vasca a la zona de Reno incluye gente de las siete provincias, pero la mayoría son vizcainos, alto y bajonavarros. Como la intersección norte-sur y este-oeste de los se encontraba en Reno, gran variedad de vascos llegaron a la ciudad. Unos venían de California y se trasladaban a tierras más al Este. Otros venían desde Nueva York y se asentaron en Reno. En torno a 1870 los vaqueros y pastores vascos y dueños de negocios empezaron a moverse de California y Nuevo Méjico hacia Reno y el norte de Nevada, donde las tierras eran gratis y libre para los pastos.

Las pensiones vascas prosperaron entre 1920 y 1940. El primer hotel fue el Comercial Hotel, construido en 1900, y dirigido por Jean Etchebarren y J.P. Aldaz. Desee 1920 hasta la década de los cuarenta, hubo hasta diez pensiones vascas. La familia Arbeloa fue dueña de cuatro de estos hoteles. Dos de ellos tuvieron frontones: el Indart Hotel y el Hotel Español. Actualmente, ninguno de estos hoteles o pensiones pertenece a vascos. El Santa Fé y el Hotel Español son los únicos que fueron construidos por vascos. Los otros, el Alturas Hotel, el French Hotel, el Star, el Altona fueron derruidos y en su lugar hay casinos. Cerca, el Indart y el Toscano duraron algo más. Hay varios restaurantes con comida vasca en Reno. Los principales son el Louis' Basque Corner y el Santa Fé. Otro, de "nueva cocina vasca", establecido en 1988, es el Pyrenees Bar and Grill, que cerró en 1993. El propietario de Louis' Basque Corner es Luis Erreguible, zuberotarra de Mauléon. Él y su mujer, Lorraine, lo abrieron en 1967 y actualmente lo explotan junto a su hija. El edificio original de la Santa Fe la quemó en 1948. La familia Zubillaga lo reconstruyó y explotó.

El primer festival vasco

Esta fiesta marcó la primera vez que vascos de varias comunidades y de diferentes estados de los Estados Unidos celebraron juntos la cultura e identidad vasca. Hubo música, dantzaris y herri kirolak.

Según William A. Douglass, el primer festival vasco, Western Basque Festival, fue en junio de 1959 en la localidad de Sparks, próxima a Reno. Cerca de 6.000 personas provenientes de todo el Oeste americano asistieron al festival. Tuvo gran éxito y la idea del festival vasco intercomunidad se diseminó por todos aquellos asentamientos vascos de California, Idaho, Oregon, Wyoming, y Nevada. Desde entonces se realizan festivales anuales en casi todas las localidades con presencia vasca. Los vascos pasaron a ser uno de los grupos étnicos más visibles de esta región.

La idea de celebrar un festival vasco a escala regional fue sugerida por Dick Graves a dos vascos de primera generación nacidos en el Oeste, Peter Echeverria y Robert Laxalt. La localidad pensada para tal evento fue Reno-Sparks, estratégicamente situada entre las grandes concentraciones de vizcaínos del sur de Idaho y Oregon, y los vascos continentales y navarros de California. Además, Reno era la única localidad de los Estados Unidos que contaba con una gran comunidad vasca formada por gentes de ambas vertientes del Pirineo.

Los organizadores intentaron contar tanto con vascos tanto europeos como americanos. A su vez intentaron extraer las experiencias más positivas de otros eventos que a menor escala habían sido organizadas a lo largo del tiempo en otras comunidades vascas, tales como picnics anuales o barbacoas. Así por ejemplo, en 1918 los vascos de Búfalo, Wyoming, celebraron el día de la Asunción de la Virgen (15 de Agosto). En 1933, los vascos de Boise, Idaho, financiaron un picnic, así como otras colonias vascas de San Francisco, el Condado de Kern, y La Puente en California. Reno también tenía su propia tradición en la organización de picnics. En 1950, cuatro vascos, entre ellos Martin Esain, Dominic Gascué, y John Saparat, crearon el Basque-American Club que financió durante un período de 6 años un picnic anual. Aproximadamente una media de 400 personas acudió al evento.

Uno de los factores que contribuyeron al éxito del festival fue el comité organizador compuesto por tres emigrantes vascos: el altonavarro Joe Micheo y los bajonavarros Martin Esain y Dominic Gascué. Micheo fue propietario de un hotel en el área de Miden-Gardnerville, mientras que Martin Esain lo era del Santa Fe Basque Hotel en Reno. Gascué fue el organizador y presidente del desaparecido Basque American Club. Su participación fue esencial para conseguir el apoyo de la comunidad local vasca particularmente de inmigrante y de los numerosos voluntarios que participaron en el evento. A su vez el comité fue complementado por cuatro vascos nacidos en América; Peter Echeverria (Bizkaia), Robert y John Laxalt (Nafarroa-Beherea, y Zuberoa), Paul Parraguirre (Nafarroa), Peter Supera (Nafarroa-Behera) y John Ascuaga (Bizkaia). Todos ellos estaban bien considerados por la comunidad vasco-americana y tenían tanto lazos personales como comerciales con muchos vascos esparcidos por todo el Oeste. Ello fue determinante para conseguir el apoyo de numerosos clubes vascos.

Las festividades comenzaron el sábado con una cena para autoridades seguida por un baile abierto al publico, amenizado por el acordeonista Jim Jausoro, de Boise. El día siguiente comenzó con una homilía en la catedral de Reno St. Thomas Aquinas, seguida por una charla del senador por Nevada Patrick A. McCarran. Tras esto hubo diversos eventos, tales como exhibición de perro pastor, competición de mus, danza, música coral, txistularis y herri kirolak.

El festival fue un importante catalizador dentro de la comunidad vasca. Muchos de los vascos de más edad que habían sufrido difíciles años de discriminación por el hecho de ser vasco y dedicarse al pastoreo, se sintieron orgullosos que la cultura y tradiciones vascas fueran reconocidas públicamente. A su vez el festival estimuló a otras comunidades vascas esparcidas por el Oeste a crear sus propias organizaciones o clubes sociales y a dar viva expresión a su cultura a través de la creación de grupos de danza, o de festivales locales anuales, que han servido para renovar la identidad étnica tanto al nivel individual como colectivo y a proyectar una imagen positiva de lo vasco.

El Western Basque Festival suscitó la atención y el apoyo de los vascos de Reno y en 1967 fundaron el Zazpiak Bat Basque Club, que celebró su fundación el día de San Martín en 1967. Hoy en día la fiesta es muy celebrada y unas 200 personas asisten la cena y baile. En general, una de las reuniónes de la federación de centros vascos, North American Basque Organizations (NABO), coincide con la fecha de la fiesta, y los delegados vienen desde todo el oeste. En 1973 el Zazpiak Bat Basque Club también publicó un libro de cocina vasca. Hay dos picnics anuales para los vascos de Reno. El primero, se celebra en julio como parte de le celebración de la ciudad de Reno llamado Art Town para el público y vascos de otras comunidades que lo asisten, y el segundo se hace en agosto para los miembros del club. El torneo de mus se hace el primero domingo de marzo y después hay una cena. El grupo de baile de Reno es dirigido por Kate Camino con la ayuda de Marcelino Ugalde. Otro grupo de baile de Reno coopera mucho con en Centro de Estudios Vascos de la Universidad de Nevada, Reno. Lisa y Enrique Corcostegui, los lidere del grupo de la universidad, se llama Zenbat Gara, también ensayan los bailadores más jóvenes. Él grupo es muy limite en números de miembros.