Monarkia eta noblezia

Carlos IV de Navarra

Exilio italiano del Príncipe de Viana, 1456-1459. En situación comprometida, Carlos huye, en mayo de 1456, a Francia. De allí pasa a Roma y finalmente a Nápoles, a la corte favorita de su tío Alfonso V de Aragón, llamado "El Magnánimo". Este trata de mediar entre su hermano y su sobrino; mientras, Nav. sigue dividida en dos sectores, con sendas Cortes que juran unas a Eleonor, otras a Carlos (mayo 1457). El Príncipe gozará en esta estancia napolitana de la paz que no había conocido desde 1444: olvida sus amores con Brianda Vaca por los de una bella. dama italiana, traba amistad con Ausias March, se relaciona con la Italia prerrenacentista, traduce a Aristóteles, en resumen, brilla por sus conocimientos y sensibilidad en una de las Cortes más célebres de Europa. Pero esto dura poco. El 27 de junio de 1458, cuando estaba a punto de fallar en el arbitraje entre padre e hijo, muere Alfonso V dejando el trono de Nápoles a su hijo natural Ferrante, duque de Calabria. La Corona aragonesa recae así en D. Juan, rey ahora de Aragón (Juan II), Cataluña, Valencia, Mallorca, Cerdeña y Sicilia. Al negarse a aceptar el trono que le ofrecen los napolitanos, el Príncipe de Viana pasa a Sicilia, donde también le ofrecen la Corona. Desde la isla pide perdón a su real padre Juan II -que ya ha jurado los fueros de Aragón y Cataluña- se lo concede bajo la condición de que pase a residir a Mallorca, ya que lo considera peligroso en Sicilia. El Príncipe desembarca en Barcelona en agosto de 1459 y reitera sus deseos de reconciliación, tras lo cual se dirige a Mallorca donde espera la respuesta.