Olerkariak

Arellano Ayuso, Ignacio

Poeta navarro nacido en Corella en 1956, catedrático de literatura y uno de los más prestigiosos investigadores de la literatura española del Siglo de Oro.

Ha sido profesor titular de Literatura en la Universidad de León y catedrático en la de Extremadura. Ejerce de catedrático en la Universidad de Navarra y es profesor visitante de varias universidades extranjeras, entre ellas la Universidad de la Sabana de Bogotá y la North of Caroline at Chapel Hill (Estados Unidos). Es asimismo secretario de "Rilce", Revista de Filología hispánica de la Universidad de Navarra, y miembro del consejo editor de diversas revistas especializadas como "Criticón", "Lucanor" o "Ínsula".

Su obra incluye numerosos estudios y ediciones críticas sobre autores del siglo de Oro: Tirso de Molina, Lope de Vega, Quevedo, Calderón de la Barca, Antonio de Zamora y otros clásicos españoles. En 1992 funda el grupo de investigación Siglo de Oro (GRISO). Es también un destacado articulista de prensa.

En 1991 publica un libro de carácter intimista: Vivir es caminar breve jornada (Barcelona, PPU 1991), y en 1977 publica su segundo poemario: Canto solo para Lisi (Barcelona, DVD ediciones, 1997). Raimundo Fernández ha destacado en ellos la atmósfera clásica y culta de los sonetos y tercetos, "con Quevedo siempre de fondo, con su Lisi y su tiempo fugitivo, y su amor más allá de la ceniza y de la muerte" (Fernández González, 2001). Por su parte, Martín Nogales los describe como versos intimistas, a veces irónicos, sobre el amor cotidiano, escritos "con la riqueza expresiva de un lenguaje en el que se perciben resonancias barrocas" (Martín Nogales, 1998).

  • Fernández González, Ángel Raimundo. Río Arga y sus poetas. Pamplona, Departamento de Educación y Cultura, Institución Príncipe de Viana, 2001.
  • Martín Nogales, José Luis. "Continuidad y renovación", en Anuario de Diario de Navarra. Pamplona, 1998.

¿POR QUÉ LLORAS?

¿Por qué, gaviota de pávidas ojeras,
te pones a llorar como manzana trémula,
si es para ti imposible todo luto
por esa misma condición de tu esplendor de corza?
¿El olvido, el silencio, la cotidiana espina
tienen, Lisi, la culpa?
¿Pero no hemos tenido las flores del cerezo,
el fulgor de la luz, las pequeñas abejas en el campo
haciendo compañía a nuestros besos?
¿No crecen tus hijos como limpios árboles
con los nombres que elegiste para ellos?
¿Y no te quiero yo, con la ceniza y todo,
desde hace mil años y para siempre?

(Vivir es caminar breve jornada, Barcelona, Thalasa Poesía, PPU ediciones, 1991).