Marqués de Iranda. En 1769, año en que se le concedió el título, compró al ayuntamiento de Errenteria la mitad de la arruinada ferrería de Renteriola, donde instaló la fandería para la elaboración de planchas de hierro que tanta admiración causó entre los industriales de la época. Al año siguiente ingresó como miembro de mérito de la Real Sociedad Bascongada de Amigos del País.
En 1773 compró a nombre de su hermano Martín los terrenos llamados los Juncales. La ilustre Casa de Contratación y Consulado de San Sebastián que regía el comercio de este puerto hizo un proyecto de arreglo del muelle que elevó a S. M. pero medió el Marqués encargándose de redactar otro el ingeniero don Julián Sánchez Bortt. En la Memoria presentada esbozaba la posibilidad de utilizar los Juncales como zona de servicio del puerto. Don Simón de Aragorri era Consejero de S. M. Un pariente suyo don José de Zuaznabar impugnó el proyecto pidiendo además detalles sobre la utilización de los Juncales. El proyecto no prosperó y fracasado el presunto negocio del Marqués, éste vendió la propiedad. En 1794 tuvo lugar la invasión de los Convencionales en cuyo epílogo desempeñó un papel notorio. Ref. Izaguirre, R.: Estudios acerca de la Bahía de San Sebastián, 1933, p. 13.