Monarkia eta noblezia

Antso I.a Gartzes (1996ko bertsioa)

Rey de Pamplona (905-926). Era hijo del magnate vascón García Ximénez cuya dinastía inaugura, después de la casa fundadora del reino, la de Eneko Arista (824-852). Resultó un acierto político el retiro de don Fortuño a Leire; acierto en cuanto deja paso hacia el poder a la persona que los tiempos reclamaban. La primera etapa de la fundación se hallaba ya en la decadencia. Esa persona es don Sancho, hombre maduro, hecho a los peligros de la guerra ya que se le supone originario de la frontera contra moros, sea por el lado de la Berrueza o por el lado de Sangüesa - Zangoza. Como dice el analista Moret «algunos instrumentos próximos como el de la «Explanación de los términos de San Juan», le celebran como sublimado por Dios al Reino para señor y gobernador de la patria y defensor del pueblo. Y, a la verdad, sigue Moret, fue tan feliz su gobierno que parece la bendición de su hermano (sic) al entregárselo, y que las oraciones y méritos de su religiosa vida tuvieran mucha parte en los prósperos sucesos de su reinado.» El Albeldense se expresa así: «En la Era 943 (año 905) se levantó en Pamplona el rey nombrado don Sancho Garcés. Fue perpetuamente insigne venerador de Jesucristo: pío con todos los fieles y misericordioso con los católicos oprimidos. En todas sus obras perseveró muy bueno. Guerreador contra las gentes de los ismaelitas, de muchos modos ejecutó estragos contra los sarracenos. El mismo ganó la Cantabria [Rioja] desde la ciudad de Nájera hasta Tudela todas las plazas. Poseyó la tierra de Deyo con todos sus pueblos. Puso a su mando la ciudad de Pamplona y cogió todo el territorio de Aragón con sus castillos.» Y como la Vasconia (Gascuña) le reconociera como rey, sus duques pasaron a ser personajes del reino. Algunos autores, como Moret, estiman que el duque vascón García el Corvo era hijo de don Sancho.