Bersolari. Iztueta, en su libro Guipuzcoaco Dantzac (1825), cuenta que el Martes de Carnaval de 1802, actuaron en Tolosa cuatro bersolaris: Zabala, Pernando, Txabalategui y Altamira, analfabetos todos ellos, pero, al mismo tiempo, los mejores bersolaris de Gipuzkoa: "Guipuzkoan aurki al zitezkean onenak". Cantaron dos contra dos durante toda la tarde, y terminaron su actuación después de anochecido, entre los gritos del público que pedía continuaran. Iztueta apunta que, de haber seguido cantando hasta el amanecer, no se hubiera movido de allí un solo espectador. Gorosábel; en su libro Noticia de las Cosas Memorables de Guipúzcoa, cuenta el mismo hecho, añadiendo que la pugna fue entre los dos primeros bersolaris contra los dos últimos, que tuvo lugar en la plaza vieja, que la opinión quedó indecisa sobre quién era el mejor, y que Altamira era de Tolosa y se llamaba Juan Bautista. Altamira es nombrado en una antigua estrofa, junto a otros bersolaris de la época.
Cfr.: M. Lecuona: Literatura Oral Vasca, 1935; 85-86.