Pintora y escultora guipuzcoana contemporánea, nacida en Irún en 1899. Aunque estudió la carrera de piano en el conservatorio de Madrid, su vocación se reveló desde niña, hacia la pintura y la escultura, disciplina ésta en la que se inició. Ganó su primer premio en el concurso de artistas noveles de Donostia. Durante la guerra residió en Francia, volviendo, al terminar ésta, a Irún, pasando una temporada en Granada. Su actividad artística se va a ampliar al esmalte, que centrará su obra en los últimos años y donde se darán sus mayores logros artísticos. Entre sus esculturas destacan La abuela, Fauno, Cabeza de San Telmo, etc. Sus esmaltes de técnica de Champlevé destacan con una serie de escenas bíblicas como: El ahorcado, El Angel Exterminador, Amanecer de Akelarre, y el tríptico de Zugarramurdi. Bilbao, 1974: "Es particularmente atractivo el quehacer escultural de Dolores Salís. Sustento de cantero de la talla directa, hace atestiguado un poder de permanencia en sus colecciones de modelos que han sido captados en los brazos de la escultora con conmovedora alimentación creadora. Sus bustos y figuras denotan una gala interpretativa en las finas modulaciones a la hora de esculpir". Lázaro Uriarte, (Bilbo, 1974): "Dolores Salís, desde su meritoria escultura más o menos impregnada de influjos italianos y franceses de primeros de siglo, ha encontrado en el esmalte una válvula creativa para sus dotes artísticas. Esmaltes técnicamente irreprochables, de temática abundosa y dispar, 'pictóricos' y sin esas monótonas y artesanales rigideces que suelen informar el género. Esmaltadas composiciones que, tan pronto nos aportan encantadores trasuntos de 'primitivos', como de tapicerías del medievo o de muralistas del 'Trecento', sin faltar los rutilantes cromatismos (tan difícilmente 'esmaltables') de vigentes estilos contemporáneos. Todo ello constituye un propio y original universo de expresión que, por sus mismas expresividad y originalidad, amplían y trascienden las posibilidades y limitaciones de un género mal llamado 'menor' y que bien merece calificarse de 'mayor' con sonata en Dolores Salís".
Ainhoa AROZAMENA AYALA
Ainhoa AROZAMENA AYALA