Montes

Monte Ulia

Uno de los tres montes que rodean San Sebastián -Igeldo, Urgull y Ulía-, éste entre la ciudad y Pasaia, hoy parque municipal. Su cima no sobrepasa los 200 metros de altura sobre el nivel del mar. A sus pies se levanta el barrio de Gros y la playa de la Zurriola. Nombre de origen gascón, también se llamó Mirall y Folía.

Su ladera está poblada por casas y villas. A comienzos del siglo XX adquirió los caracteres de un parque de recreo con campo de tenis, tiro de pichón y otros atractivos. Entre sus merenderos destacaba el denominado "El Molino". La vista desde las cimas es espléndida, sobre todo desde los clásicos miradores de la Peña del Rey, Peña del Ballenero y Peña del Águila. Desde junio de 1907 el transbordador de Torres Quevedo unía las dos eminencias del monte y desde 1910 un tranvía la cima con el centro de Donostia. Pero duró poco su atractivo turístico y de recreo ya que, al inaugurarse en 1912 el parque del Monte Igeldo, decayó su atractivo en beneficio del otro extremo de la ciudad que contaba con el aliciente de la playa de Ondarreta.

En 1742 se realizaron diversas fortificaciones en la falda de Ulía, instalándose piezas de artillería proporcionadas por la Real Compañía Guipuzcoana de Caracas, más tarde reducidas a la batería de Mompás.

Uno de los tres montes que rodean San Sebastián -Igeldo, Urgull y Ulía-, éste entre la ciudad y Pasaia, hoy parque municipal. Su cima no sobrepasa los 200 metros de altura sobre el nivel del mar. A sus pies se levanta el barrio de Gros y la playa de la Zurriola. Nombre de origen gascón, también se llamó Mirall y Folía.

Su ladera está poblada por casas y villas. A comienzos del siglo XX adquirió los caracteres de un parque de recreo con campo de tenis, tiro de pichón y otros atractivos. Entre sus merenderos destacaba el denominado "El Molino". La vista desde las cimas es espléndida, sobre todo desde los clásicos miradores de la Peña del Rey, Peña del Ballenero y Peña del Águila. Desde junio de 1907 el transbordador de Torres Quevedo unía las dos eminencias del monte y desde 1910 un tranvía la cima con el centro de Donostia. Pero duró poco su atractivo turístico y de recreo ya que, al inaugurarse en 1912 el parque del Monte Igeldo, decayó su atractivo en beneficio del otro extremo de la ciudad que contaba con el aliciente de la playa de Ondarreta.

En 1742 se realizaron diversas fortificaciones en la falda de Ulía, instalándose piezas de artillería proporcionadas por la Real Compañía Guipuzcoana de Caracas, más tarde reducidas a la batería de Mompás.

Desde el punto de vista tectónico forma parte de la llamada Cadena Costera, que va desde Hendaia a Zumaia, con un recorrido aproximado de 40 km. Está formada por materiales terciarios (areniscas y margas fundamentalmente), con un relieve festoneado y ondulado a causa de los esfuerzos secundarios de comprensión lateral (Este-Oeste), combinados con los esfuerzos principales de comprensión regional efectuados por el zócalo cristalino anexo a la Meseta Castellana y por el Macizo de Cinco Villas.