Concepto

Historia del Arte. Modernidad

Con el inició del siglo XX, surgió en el ámbito cultural y artístico el concepto de modernidad. Este término comenzó a utilizarse para referirse al arte que se realizaba para la sociedad del momento y desde la perspectiva del presente, en oposición al que se realizó en el período ecléctico a finales del siglo XIX vinculado también a la sociedad del momento pero desde la perspectiva del pasado, fundamentalmente, a través del historicismo. En el seno de esta modernidad, a los movimientos y corrientes artísticas que proponían rupturas con las formas de creación tradicionales y establecidas, y abogaban por nuevos lenguajes artísticos, se les denominó vanguardias.

En Euskal Herria, esta primera etapa del siglo XX coincidió con un período convulso políticamente ya que en tres décadas se sucedieron una monarquía -la de Alfonso XIII-, una dictadura -la de Primero de Rivera-, una república -la II República- y una nueva dictadura -la de Franco-, después de una guerra civil. Sin embargo, económicamente Euskal Herria conoció durante este período su momento de mayor crecimiento, desarrollo y esplendor tanto económico como social y cultural.

En el ámbito artístico, el arte realizado en Euskal Herria también comenzó a situarse en la vanguardia del panorama español, ya que las primeras manifestaciones artísticas modernas llegaron a través de Euskal Herria. Sin embargo, los movimientos de vanguardia, tanto culturales como artísticos, desarrollados durante este período en otras áreas de Europa -Francia, Alemania e Italia, principalmente- aquí no se conocieron. De hecho, en Euskal Herria durante este período no surgieron movimientos de vanguardia sino que, generalmente, y con retraso, se adaptaban y se amoldaban los procedentes del exterior a las características del arte que se realizaba en nuestro territorio. Por todo ello, a esta primera etapa del siglo XX, que en el ámbito europeo se le denomina período de vanguardia, en el contexto vasco la conocemos como fase de modernidad ya que, aunque se hace un considerable esfuerzo por situarse al mismo nivel que el arte europeo contemporáneo y se intenta responder a las nuevas necesidades de la sociedad vasca, la propia sociedad no estaba preparada para asimilar las novedades y sólo aceptó una renovación moderada de sus manifestaciones artísticas.