Arquitectura

Parroquia de San Nicolás de Bari. Burguete

La parroquia de San Nicolás de Bari de Burguete, en la calle principal, tras sufrir varios incendios, tiene un aspecto fruto de las sucesivas reconstrucciones realizadas en 1948 y 1965, pero en ellas incorpora restos de fábricas anteriores, entre los que encontramos dos ventanas abocinadas en la cabecera y en el tramo vecino al crucero que corresponden a la Edad Media; restos de nervios y ménsulas en la cabecera y en el crucero del siglo XVI o la fachada con un portada monumental fechada en el siglo XVII. Con planta de una nave de tres tramos que comprenden el crucero y uno más correspondiente a la cabecera recta. El crucero, destacado en planta, se eleva a la altura de la nave. Sus muros son de sillarejo y cubierta enlucida. La nave está cubierta con bóvedas de arista y la cabecera y los brazos del crucero con bóvedas de lunetos. El coro que se levanta a los pies es de obra. A la moderna sacristía de planta rectangular y dos tramos se accede por el crucero de la Epístola a través de un arco de medio punto.

Al exterior, la fachada de sillar culmina en piñón, flanqueada por pináculos, en cuyo centro se sitúa el reloj y culmina con una torrecilla cuadrada. En la parte inferior de la fachada se conserva una portada de 1699, de estilo barroco clásico. El sillar deja ver en el lado del Evangelio grandes lienzos de muro cada uno con óculo separados por un contrafuerte y el saliente brazo del crucero.

Debido a los sucesivos incendios se ha perdido el ajuar de la iglesia, aunque se tiene noticias de la construcción en 1843 de un nuevo retablo y de que en 1898 se decoraron y pintaron los retablos de la iglesia. Lo que queda en la actualidad es todo moderno. Lo que si se conservan son algunas piezas antiguas de orfebrería que se guardan en la sacristía. Como un cáliz de plata barroco del siglo XVIII, liso con nudo en forma de pera. Un cáliz de metal dorado de estructura bajorrenacentista evolucionada y con decoración puntada con motivos vegetales que apunta al barroco. Un copón de plata, liso, con cruz romboidal en el remate, del siglo XIX que se puede identificar como el que fue regalado por los canónigos de Roncesvalles en 1819 a la parroquia tras la invasión francesa.