Cinematográficas

Bosque de sombras

Coproducción del año 2006 entre las productoras españolas Monfort Producciones, Filmax y Videntia Frames, la inglesa Holy Cow Films y la francesa Divine Productions. Contó con la colaboración, entre otras entidades, del Gobierno Vasco, de Euskal Telebista y de la Generalitat de Catalunya.

Supuso el debut en la dirección de largometrajes de Koldo Serra, ganador del Méliès de Oro en el 2003 por el cortometraje El tren de la bruja. El primer éxito de este destacado proyecto fue lograr involucrar en el mismo a actores internacionales de la talla de Gary Oldman (protagonista de películas como Sid y Nancy, Drácula de Francis Ford Coppola o El quinto elemento de Luc Besson), Virginia Ledoyen (8 mujeres, El internado o La playa) y Paddy Considine (My Summer of Love, Stoned o Cinderella Man). Por otro lado destacan actores españoles como Aitana Sanchez-Gijón, un extraordinario Lluis Homar y Alex Angulo. La acción se desarrolla, tal y como reza un subtítulo al inicio, en el norte de España en 1978. Lucy (Virginia Ledoyen) y Norman (Paddy Considine), una pareja inglesa en plena crisis amorosa, viajan con sus amigos Paul (Gary Oldman) e Isabel (Aitana Sánchez-Gijón) a una casa que ha comprado Paul en medio de un intrincado bosque para pasar unas tranquilas vacaciones. Pero en la primera salida por el bosque Paul y Norman encuentran en una borda a una niña encerrada con las manos totalmente deformadas por una horrible enfermedad.

A partir de ese momento los veraneantes intentarán llevar a la niña a la policía pero la abrupta naturaleza del lugar, la climatología adversa y los familiares de la niña intentarán impedírselo a toda costa. La espiral de violencia que desarrolla Serra en Bosque de sombras parte de unas referencias cinematográficas muy claras; el cine americano de los setenta. Por ejemplo es evidente la deuda con Deliverance (1972) de John Boorman. Al igual que en esta obra Serra plantea un film que tiene como tema la violencia en un majestuoso entorno natural cerrado y hóstil. El mismo Serra reconoció que había elegido la localización de Artikutza para rodar por su devoción hacia obras como La fuga de Segovia (rodada en parte allí) y Deliverance. Los títulos de crédito iniciales son un claro homenaje a Grupo salvaje de Sam Peckinpah y la atmósfera de Perros de paja del mismo cineasta se hace evidente en muchos momentos de la película del cineasta vasco. Al principio del film, sin ir más lejos, cuando Lucy entra sudada y sensual al bar del pueblo provocando las miradas de lascivia de los lugareños. O la escena en la que la propia Lucy sufre un intento de violación, con la posterior aparición de Norman con un fusil. En Perros de paja el personaje interpretado por Dustin Hoffman, un pacífico matemático, sufre una transformación radical tras ser provocado reiteradamente y se ve impelido por las circunstancias a obrar de manera violenta. Incluso acabando ya la película, el esbozo de una sonrisa delata que no hay arrepentimiento por su actuación sino más bien orgullo.

El viaje que realiza Norman es similar. Un hombre apocado y dubitativo se transforma al final, tras sufrir una experiencia traumática, en un cazador que ha encontrado en la violencia un sentido a su vida. El director vasco dota al largometraje, sobre todo en la primera parte, de una lograda atmósfera de angustia. Las diferencias de las parejas en medio de un calor sofocante se convierten, tras el encuentro de la niña y el contacto con los lugareños, en una denodada lucha por la supervivencia en un bosque embarrado por la lluvia convertido en una trampa mortal. Algo parecido a lo que ocurre en otra producción vasca, Viento de cólera (1988) donde, por cierto, también Aitana Sánchez-Gijón tiene un papel protagonista y donde el paisaje, al igual que en Bosque de sombras, es un personaje más. Película en fin, sobre la violencia, la incomunicación y el choque de culturas, Bosque de sombras es una producción muy interesante, realizada con gran talento y a la que sólo se le puede objetar un final que no está a la altura de la excelente primera mitad y una excesiva dependencia de ideas y propuestas formuladas antes por otros cineastas.

  • Roldán Larreta, Carlos: Secundarios vascos de primera 2, Donostia-San Sebastián, Filmoteca Vasca-Euskadiko Filmategia, 2008, 311 pp.