Yacimientos arqueológicos

OLHA

Yacimiento prehistórico situado en Cambo, Laburdi.

Abrigo de Olha I. Está bajo un saliente de roca cerca de donde el arroyo de Olha confluye en el Nive. Descubierto en 1913 como yacimiento prehistórico por E. Passemard fue excavado en 1917 por él mismo. La importancia arqueológica del abrigo de Olha I radica sobre todo en la densidad de sus niveles del Musteriense (ricos en fauna y en industria lítica) y en lo que aportan al conocimiento de esa época en Euskal Herria (junto a Lezetxiki, Axlor e Isturitz) y, en general, en todo el Sudoeste europeo, entre cuyas estaciones importantes debe incluirse la de Olha. En sus colecciones, precisamente, tomó pie F. Bordes para la definición de una facies "regional" del Musteriense: el Vasconiense "con lascas Olha" trabajadas como hendedores. Junto a ellas son abundantísimas las industrias de piedra tallada propias del Paleolítico Medio: puntas musterienses, raederas, algunos bifaces, denticulados, etc. El lugar de Olha I conoció diversos hundimientos del techo-visera del abrigo, cuyos bloques se mezclaron con el relleno arqueológico que iban dejando quienes lo ocuparon en la Prehistoria. Es así cómo E. Passemard pudo diferenciar hasta tres sucesiones de hogares: Fi u hogares inferiores (subdivisible en cuatro estadios Fi4, Fi3, Fi2, Fi1), Fm u hogares medios y Fs u hogares superiores. Todo ello suma un depósito estratificado de cerca de cinco metros de potencia. Parece observarse en el rellano del abrigo de Olha I la posibilidad de agrupar los utensilios de industria humana y las muestras de fauna de mamíferos en dos conjuntos distintos. Los correspondientes a los niveles Fi4 y Fi3 presentan caracteres comunes que se diferencian bastante notablemente de los Fm y Fs: se presentan el reno y el mamut aquí, siendo sustituido el rinoceronte de Merck por el lanudo. Siendo los niveles Fi2 y Fi1 etapas "de transición" entre lo que en alguna ocasión se ha calificado como Musteriense "cálido" y Musteriense "frío" en Olha. La identificación cultural de los niveles del depósito del Musteriense en Olha no ofrece dificultad. Mientras que en los tres horizontes de hogares inferiores (Fi4, Fi3, Fi2) la caracterización debe hacerse a favor de la facies Vasconiense, los niveles Fm y Fs (y quizá, también, el Fi1) se asemejan a la facies Charentiense. Más en concreto -y según H. Delporte ( 1974)- se han de subrayar dos hechos esenciales: a) "que aparte las lascas Olha ('hendedores'), el stock musteriense no conoce a través de todo el depósito estratigráfico del abrigo sino variaciones menores"... y b) que el fenómeno de los hendedores parece muy bien delimitado en el tiempo: "aparece en Fi4, se desarrolla en Fi3, disminuye en Fi2 y desaparece en Fi 1 ". En el último cuarto del siglo pasado, según noticia recogida por Passemard, unos obreros que extraían piedra del sitio de Olha hallaron en el sitio huesos de caballo y algún cráneo humano. No se dio, lógicamente, valor alguno al descubrimiento, de forma que se perdieron aquellas evidencias que con probabilidad correspondían al yacimiento prehistórico y, acaso, al tipo humano de Neanderthal que lo ocupó.

Abrigo de Olha II. No lejos de Olha I, ha sido excavado por G. Laplace en varias etapas, desde 1948 hasta finales de la década de los 70. En su estratigrafía se distinguen tres grandes etapas de depósito: la inferior, de gravera y canto rodado de base; la media, con industrias musterienses relativamente similares a las de Olha I (con hendedores del tipo Vasconiense) depositada en la primera parte de la glaciación de Würm; la superior, también del Musteriense, con el ajuar propio de la época (puntas, raederas y denticuladas: que suponen casi el 90 % de todo el efectivo).

Ignacio BARANDIARÁN MAESTU