El urbanismo de la villa sigue un plano de tipo regular directamente inspirado en los campamentos militares o bastidas. En el caso de la antigua Villarreal de Urrechua, la planta rectangular se organiza en dos calles rectas y paralelas que originan tres manzanas de casas, doble la central y simples las dos exteriores. Además de estas dos calles principales, otras más pequeñas atraviesan el plano urbano en su parte más estrecha para posibilitar la comunicación entre las calles principales. Estas calles son los cantones, habitualmente más estrechos que las calles principales.
En una villa medieval como Urretxu no podía faltar la muralla. Generalmente existía un lugar de paso entre las casas y las murallas para facilitar la defensa del interior. Las casas solían ser de planta alargada, con fachada estrecha y mayor desarrollo en profundidad. Aunque sabemos que solían ser de entramado de madera y adobe o ladrillo no se conservan en la actualidad dado que ha sido necesario adaptarse y enriquecerlas a lo largo de los siglos. Sí es importante notar la mayor permanencia de los solares y de sus dimensiones junto con el trazado de sus calles y cantones, así como la desaparición de las murallas como consecuencia de la ampliación de la villa.
AGS 2011