Politicians and Public Officials

Urquijo Muga, Mariano Luis

La caída de Urquijo obedeció a múltiples impulsos. Por una parte, su fuerte personalidad molestó al cónsul Napoleón Bonaparte (primer cónsul desde el 18 de brumario de 1799) que ya había conseguido la firma del segundo tratado de San Ildefonso (1 de octubre de 1800), sobre todo cuando se vio privado de la escuadra española de Brest -que ayudaba a la francesa- y tropezó con la resistencia del bilbaíno a que su hermano Luciano fuera nombrado embajador de París en Madrid. La Reina, a la que el corso había prometido dotar a su hija con un reino en Italia, debió de tomar cartas en el asunto. Por otra parte se hallaba Godoy que, aunque separado del poder, seguía influyendo sobre los Reyes y no perdonaba a Urquijo que se hubiera opuesto a que su hijo fuera apadrinado por éstos. Finalmente está la Santa Sede soliviantada por la política regalista de Urquijo. Fue cesado, así, en su calidad de ministro el 13 de diciembre de 1800 y confinado en Bilbao. El Santo Oficio reabrió su proceso y, acusado de masón, fue encarcelado en la fortaleza de Pamplona desde el 21 de marzo de 1801 hasta el 5 de octubre de 1802.