Military

Muscar, Arnould

Militar laburdino, nacido en Bayona el 1 de abril de 1754, en una casa de la calle Port-Neuf. Desconocemos fecha y lugar de fallecimiento.

En junio de 1774, se enroló en el regimiento de Vivarais, entonces en guarnición en Bayona y en el momento de la Revolución no era todavía más que sargento furriel, aunque tuvo treinta y dos años de servicios. En menos de 6 meses, franqueó tres nuevos grados; el 26 de abril de 1792, fue nombrado subteniente; en junio, teniente, y en Valmy, Kellermann le había nombrado capitán adjunto de los ayudantes generales. Hizo la campaña con Custine y fue nombrado comandante del 8.° batallón del Bajo Rhin. Este batallón había sido destinado a la Vendée; no formaba, mediante sus ocho compañías, más que 421 suboficiales y soldados y 30 oficiales. El estado mayor se componía de 5 oficiales solamente, pero entre éstos hay que citar a Brutus Hugo, el padre del gran poeta, con el cual Muscar trabó una estrecha amistad. Fue en Ostende cuando consiguió el apogeo de su gloria.

El 30 floreal año VI -19 de mayo de 1798- apareció una escuadra de 20 navíos ingleses, desembarcando de 2 a 3.000 hombres. Tenían orden de hacer saltar las esclusas de Brujas, con el fin de destruir la navegación interior entre Holanda y Flandes, después apoderarse de la ciudad. La temeraria empresa tuvo en un principio éxito. El desembarco tuvo lugar. Pero durante este tiempo, se cambiaba una viva lluvia de cañonazos entre los navíos más aproximados a la plaza y ésta. Tres fragatas y dos bombardas balas, devastando la ciudad. Muscar no tenía más que 300 hombres para hacer frente al enemigo, al incendio y a los habitantes que no estaban muy seguros, y cuando Coote le pidió que se rindiese, él le respondió de la forma más enérgica. El fuego se redobló y la ciudad ardía ya en varios puntos, cuando el viento, que de repente se hizo muy fuerte, se puso de su parte.

El almirante se vio obligado a ganar la alta mar y las tropas del desembarco fueron tomadas entre los fuertes y una mar muy agitada. Al mismo tiempo, llegó la noche y con ella algunos refuerzos; el comandante de Brujas, prevenido, avanzaba con 500 hombres; las guarniciones de Neapert y de Gante, estaban en camino. Muscar no quiso esperarles, con sus 300 hombres y las tropas de Brujas se lanzó con la bayoneta sobre los atrincheramientos de los ingleses y los levantó. El enemigo no había perdido más que unos sesenta hombres, pero la vivacidad del ataque había sido tal que el general Coote creyó estar tratando con fuerzas superiores y se rindió con 1.424 hombres, de los que uno era general y había varios oficiales superiores.

Esta victoria tuvo mucho resonancia y Muscar fue comparado con Leonidas, Ostende con las Termópilas, los ingleses con los cobardes soldados de Jerjes, según el gusto de la época y el estilo del tiempo. El Consejo declaró, como en los grandes días de la Convención, que los vencedores de Ostende había merecido bien la Patria. Sin embargo, Muscar fue pronto olvidado; se le hizo jefe de brigada, es decir, coronel y se le dejó al mando de Ostende. En 1811 Napoleón le dio la cruz de la Legión de honor. Una calle de Lille llevó su nombre, pero en su ciudad natal nada recuerda a este valiente soldado y su actuación.

Ref. Edouard Duceré: Dictionnaire historique de Bayonne, 2 vols, Bayonne, 1911-1915.