Place Names

México

1976: La Fanfare de Gaztelubide, donostiarra, en México. Su presencia fue todo un acontecimiento en el país. Fue una embajada del humor. Oirla en su salsa fue un regalo. Estas expresiones se pudieron leer en la prensa de aquel tiempo. Visitas a centros benéficos, centros vascos, llevando una atmósfera de optimismo y alegría. La TV llevó sus melodías y su humor a todos los rincones del inmenso país, a los vascos dispersos y sus descendientes. La casa Domecq les dio un banquete, reuniéndose hasta seiscientos comensales. Las crónicas de aquel tiempo dan nombres de los asistentes: los Regueiro, Lángara, Blasco, Eguzkiza, Aguirre y otros supervivientes de aquella selección de fútbol de Euzkadi, del 36. Se citan como asistentes: Antonio de Armendáriz, diplomático, el donostiarra Venancio Recalde a quien se calificó de "doble" del presidente electo López Portillo de ascendencia navarra por su parecido físico; M.ª Angeles Esnaola, hija del maestro Secundino Esnaola; Noel Souza, empresario y propietario del Frontón México, donde juegan 35 puntistas; el naviero Martín García-Urteaga. Y la lista sería interminable.

El Centro Vasco ofreció una gran cena en honor de la embajada donostiarra, preparada por Paco Turrillas, gerente. Se impusieron varias medallas de oro de la Fanfare así como txapelas a Chento de Echegaray, Alberto Abad, a Víctor Gracia, presidente del Centro, etc. El doctor Echebarren agradeció las atenciones recibidas. Gaztelupe de México. Situada en Amsterdan, 55. Su presidente, el elgoibarrés Juan José Arrillaga y como importante colaborador Víctor Gracia, uno de los cantantes del "Xey". La Fanfare donostiarra actuó también en el Hospital Hispano de Ancianos mantenido por vascos, gallegos y leoneses. Las canciones donostiarras invadieron los pabellones, llevando consuelo y esperanza. Allí atendían a los ancianos algunas monjas vascas, de Amorebieta, Guernica, y las hermanas Azpillaga Zubillaga de Herrera-San Sebastián. Y todas hablaban el euskera. Vicente Escudero resume sus crónicas sobre el viaje de Gaztelubide: "En México fuimos recibidos por un centenar de niños de ambos sexos con txistu y tamboril y un enorme cartel diciendo "Ongi etorri" y nos despidieron con un mariachi, que hizo corro y puso al enorme aeropuerto en danza. La estancia en México de la Fanfare de Gaztelubide dejó honda huella, por sus muestras y humorísticas intervenciones. México bien merece un viaje".

En 1972 este jesuita oriundo de Idiazábal visitó la C. de México y publicó una apretada crónica en El Diario Vasco, 30 de abril del mismo año. Al contemplar la bella iglesia de San Felipe de Jesús, "del más puro estilo colonial", descubrió una lápida antigua que decía: "Capilla de la milagrosa imagen de Nuestra Señora de Aránzazu y entierro de los hijos y naturales de las tres provincias de Vizcaya y reino de Navarra, de sus mujeres, hijos y descendientes, a cuya costa se fabricó y dedicó en el año de 1668". El cronista llegó a localizar hasta cuatro capillas dedicadas a la patrona de Guipúzcoa: una en Puebla, ya desaparecida, otra en Sombrerete (Zacatecas). La tercera en San Luis de Potosí, del más puro estilo churrigueresco. La cuarta, la ya citada de Ciudad de México. Las hermandades y cofradías desempeñaron un importante papel en la época colonial. Corporaciones que ejercieron un influjo decisivo en la vida económica, social y cultural.

"La dirección de la Cofradía la formaban un rector, dos diputados, de cada una de las tres provincias vascongadas, dos por el antiguo Reino de Navarra, dos descendientes de vascos nacidos en cualquier provincia de Nueva España y otros dos vascongados de cualquier parte que fuesen. La Cofradía sólo admitía donaciones de vascos. No pedía limosnas para mantenerse en una actitud de suma independencia, sin tener que someterse a ningún bienhechor".

Los hermanos Ostolaza Zabala y su espíritu de empresa. Finalizada la guerra de Cuba en la que participó José Manuel Ostolaza Zabala, embarcó para México, desembarcando en Veracruz con una carta de recomendación y diez pesos mexicanos. Llegado a Tehuacán, en el estado de Puebla, se colocó en casa de Leonardo Aldama. Llevaba la ventaja de haber practicado en Bilbao, durante cinco años, la actividad comercial por cuenta ajena. Los dos años en la casa de Aldama le permitieron conocer los modos de operar mexicanos. La industria de la sombrerería, que habían comenzado los misioneros en México enseñando a tejer a los indios, fue adoptada por Ostolaza. Compraba lo que se llamaban "cuerpos de sombreros", de paja, vendiéndolos a los comerciantes norteamericanos. En 1901, con dos socios, desarrolló el comercio de los sombreros de palma, jarcia y otros productos del país. Entró también en el comercio del café verde.

En 1907 llegó a México su hermano Francisco que dominaba el inglés y el francés y con buena formación comercial. Con este refuerzo establecieron una oficina en Estados Unidos. En 1910 crearon la Mexican American Hat Company o Compañía Mexicano- Americana de sombreros. José Manuel Ostolaza conoció en México a Aurelio Arteta, el más grande de los pintores vascos, como refugiado de la guerra de 1936. Ostolaza le encargó la obra Romería Vasca. El pintor bilbaíno murió en un accidente de tráfico el 10 de octubre de 1940. Por voluntad de Ostolaza, esta gran pintura se guarda actualmente en la Diputación de Guipúzcoa. Los hermanos Ostolaza eran naturales de Deba, en Guipúzcoa. Aprendieron en América, en México y USA una gran lección: que para triunfar en aquellos países debe irse bien preparado. Para esto creó en Deba la Fundación Ostolaza y más tarde su hermano Francisco la Escuela de Iniciación Profesional industrial y la Biblioteca Municipal.

Conduce a México un cargamento de "bienes y dinero" de la República. El financiero Marino de Gamboa colabora con Juan Ignacio Lizaso, delegado del Gobierno Vasco en Londres, buscando soluciones para el problema de los refugiados. Intentaba crear colonias vascas en los países sudamericanos. Y crea la Compañía Naviera "Mid Atlantic". Adquiere el yate "Giralda", que había pertenecido a Alfonso XIII, cambiándole el nombre por el de "Vita". El capitán Ordorika recluta marinos nacionalistas de su pueblo, Lekeitio. Ordorika se había destacado burlando el bloqueo franquista de aquel tiempo. Como primer oficial figuraba Isaac Etxabe y segundo Antton Brouard. El Lehendakari J. A. de Aguirre estaba informado desde el comienzo. El proyecto de Marino de Gamboa fue interferido por los republicanos que solicitaban el "Vita" para una "delicada y secretísima misión". Transportar el citado cargamento a México para dotar de fondos al SERE, Servicio de Evacuación de los Republicanos Españoles, creado por Negrín. Consultado el presidente Aguirre ordenó poner todo a disposición de los republicanos. En 1939, el "Vita" es visitado en Soutthampton por Manuel de Irujo y Juan Ignacio Lizaso. Presto para zarpar, los agentes de Negrín no se presentan para hacerse cargo del envío. El capitán Ordorika y el militar Puente encargados de la custodia de la valiosa carga, actúan. Ordorika se pone en contacto con Indalecio Prieto, embajador republicano en México. Esta gestión permite al capitán Ordorika realizar el viaje. Ordorika gozó de gran prestigio en México y llegó a ser presidente del Centro Vasco.

"Con los fondos del "Vita", la JARE (Junta de Ayuda a los Republicanos, creada por Prieto, se creó entre otros centros e instituciones, el Colegio Madrid, donde estudiaron un buen número de jóvenes, hijos de exiliados. Entre ellos, los tres hijos de Ordorika (Imanol, Nile y Jokin), que habían acompañado a su padre al destierro. El mayor, Imanol Ordorika Bengoetxea, es profesor de la Universidad Nacional de México y destacado artista en aquel país. En Euzkadi cuenta con obras en los Museos de Bilbao y Vitoria".

DEIA. 15 de marzo de 1981.

El primer frontón de México se abrió el 15 de diciembre de 1895 con el nombre de Eder Jai, actualmente desaparecido. El cuadro que lo inauguró estaba formado por los siguientes pelotaris: Eladio Arizti, Miner, Mendaro, Miguel Goenaga, Artia, Guruceaga, Tucumán e Iribarren. Era intendente Rogelio Zubiri. Al construirlo se enviaron a Euskalerria, a contratar pelotaris. Y llegaron a México Hilario Garro, Santos Suinaga, Hnos. Salazar, Irigoyen, Abadiano, Bracamán, Amoroto, Chiquito de Irún, Ciarán, el Bilbaíno, Aramburu, Jimeno, Arechavaleta, Chiquito de Ermua.

En 1929 ya funcionaba el Frontón México con su intendente Angel Ibaceta. Pero en 1927 había nacido la "Sociedad Sport vasco" SA y la Sociedad mexicana "Deporte Vasco". El alma de estas actividades era el licenciado Jorge Ugalde. Y pronto se crea la Federación Mexicana de Pelota. En 1950 entra México en la Federación Internacional de Pelota Vasca. Año 1952: bajo la presidencia de Jorge Ugalde logra algunos subcampeonatos en pala larga y cesta punta. En 1955 asiste México a los campeonatos de Montevideo: cesta punta, pala corta, paleta, mano y frontenis. Asiste en 1958 a los campeonatos en Francia. En 1962 en Pamplona. Y ya es habitual su asistencia a los sucesivos torneos.

Olimpiada de 1968, en México. Se presenta en frontón corto y largo. En San Sebastián, 1970. Concurre a Uruguay 1974, último año de la presidencia de Ugalde. Desde 1966 a 1970 México fue representado en la Federación Internacional de Pelota Vasca por J. Ugalde y Adrián Zubicaray.

Actividad pelotística dentro de México. Se organizan campeonatos nacionales estando dividido el país en 7 regiones. La especialidad a mano ha tomado un gran auge. El censo de 1970 dio 117.200 deportistas que practican la pelota vasca. Al construirse el frontón Eder Jai se enviaron emisarios a Euskalerria, a contratar pelotaris. Y llegaron a México, Hilario Garro, Santos Suinaga, Hnos. Salazar, Irigoyen, Abadiano, Amoroto, Pracamán, Chiquito de Irún, Ciarán, el Bilbaíno, Aramburu, Juan J. Jimeno, Arechavaleta, Chiquito de Ermua. "Últimamente (1971) y desde México, un notable periodista donostiarra, Francisco Turrillas -que previamente diera forma literaria a la fascinante autobiografía del célebre puntista Guillermo- (Amuchastegui) ha escrito un libro muy sugestivo y curioso sobre nuestro deporte popular". Miguel Pelay Orozco; La encrucijada, "La pelota vasca y la literatura", pp. 89-92. En la década de los 30 fueron a México los puntistas José Argoitia, Pedro Lizarraga, José Ramón Ulacia, Alejandro Argárate y Julián Arana. México también pudo admirar a Guillermo Amuchastegui, el oso de Ondárroa, el rey de las canchas americanas. Le había precedido Eusebio Erdoza otro monarca en su tiempo. Los dos llenaron los frontones de Cuba y México y otros países.

Ref. Luis Bombín; Historia, Ciencia y Código del Juego de Pelota, Pelay Orozco, Miguel; Pelota, pelotari, frontón. Madrid, 1983.

El canónigo Alberto de Onaindía visita México en 1948. En su obra Experiencias del exilio, II. Ekin, Buenos Aires, 1974, nos da interesantes noticias. Menciona a las familias Orbe, Plazas, Belausteguigoitia, García-Urteaga, Izaurieta y a los pelotaris de los años 30 que sonaban entre los famosos, Jaime Inchaundaireta y Larrinaga, "Larri". De su visita al frontón de Tijuana, en la frontera de México y USA, dice así:

"Los pelotaris eran hijos de otros pelotaris, amigos de mi niñez, y allí junto al frontón, un restaurante, Txiki Alai, de un simpático andaluz. Sus paredes estaban adornadas con fotografías de los veteranos, los hermanos Erdoza, sobre todo el fenómeno Eusebio, que dudo haya tenido sucesor digno del viril deporte de la cesta punta, los Gazaliz, Amedillo, Amoroto, Marcelino, Barrenechea, Ugartechea".

Martín de Barinagarrementería, de Zorroza, Vizcaya, llegó a México en 1950. Vivió en la selva durante años. Propietario de "Maderas Legaraia" que exportaba a diversos países. Fue presidente del Centro Vasco de México hacia 1976.

Rufino Prieto Tellechea, de Vera de Bidasoa, llegó también a ser presidente del Centro Vasco.

En El Diario Vasco, San Sebastián, 19 de noviembre de 1976, el redactor Vicente Escudero da algunos datos: viven en México, 11.000 familias vascas y de 700 a 800 exiliados. En una foto que acompaña al reportaje aparece el periodista con Alberto de Asua, director general de Forjas de México, SA e Iñaki Erro, destacado andinista, en una de las fiestas del Centro Vasco de la capital. Además existe la Sociedad Gaztelupe, entidad donde se reúnen vascos de todas clases para conversar, intercambiar periódicos, jugar al mus, cocinar, etc.

Cristalizaron en la creación de "Petronor", Petróleos del Norte, domiciliada en Las Arenas, Vizcaya. Su accionista mayoritario es "Pemex", empresa estatal de "Petróleos Mexicanos", con un 34,28% de las acciones. Siendo presidente del consejo José Miguel de la Rica se produjo un beneficio de más de 3.000 millones de pesetas. Los datos de 1983 relativos al comercio vasco- mexicano magnificaban su importancia. El 50% de las exportaciones vascas iban por este orden, de Francia, República Federal alemana, México, Irán y Reino Unido. Las importaciones, de más del 50%, desde otros países, provenían de México en cuarto lugar.