Political Parties

Herri Batasuna

El Pacto autonómico firmado por los partidos PNV, PSOE, ESEI, PCE, DCV y ANV, comprometía a éstos a constituir los electos de las cuatro provincias una Asamblea de Parlamentarios que elaborara un proyecto de estatuto de autonomía que salvara el derecho de Navarra a acogerse al mismo. Presionado por UCD de Navarra, el Gobierno introducirá la fórmula referendaria previa para el caso de que Navarra (el Consejo Foral) decidiera formar parte del Consejo General Vasco nacido del régimen preautonómico que se decreta el 31 de diciembre de 1977.

Así, mientras las otras tres provincias acceden automáticamente al CGV, Navarra es relegada hasta que se efectúe una hipotética consulta popular (que nunca se llevará a efecto). La Constitución recogerá inmediatamente, consagrándola, esta imposición "navarrista" de corte muy similar a las apelaciones a la foralidad efectuadas por la derecha navarra, en situaciones similares, desde 1841. Ante este desarrollo de las negociaciones, la Mesa de Alsasua se endurece y presenta a todos los partidos una alternativa desesperada de territorialidad que resume así:

"Conseguido ya el reconocimiento del Marco Territorial de Euskadi Sur y ante la regresión que supondría la puesta en vigor de un Preautonómico sin Nafarroa, proponemos que, al igual que los parlamentarios navarros decidirán no incluirse en el Preautonómico, lo hagan los parlamentarios vizcaínos, alaveses y guipuzcoanos, en tanto no se produzca una decisión unánime de incorporación en las cuatro regiones, situación que pudiera producirse tras las Elecciones Municipales."

La alternativa, que marca el máximo punto de inflexión entre partidos posibilistas y fundamentalistas, sólo recogerá la adhesión de los minoritarios EKA, OCE (BR) y LKI. Es en este contexto cuando la legalización de EIA y su entrada en el CGV, deja a la Mesa reducida a los cuatro restantes partidos firmantes de la alternativa. La izquierda abertzale quedará así dividida en dos bloques definitivos: Euskadiko Ezkerra y, desde el 27 de abril de 1978, Herri Batasuna: nuevo nombre de la Mesa de Alsasua. El trasiego de militantes de una a otra coalición durará meses, incluso años. En esta tesitura se entabla la lucha por el poder dentro del periódico "Egin" que, fundado por miembros y cuentapartícipes pertenecientes a toda la izquierda abertzale, acabará siendo férreamente controlado por HB.

La revista "Punto y Hora" pasará también a su órbita, constituyendo, junto con alguna publicación menor, su aparato publicitario más contundente. Ambas coaliciones serán apoyadas por sendas ramas de ETA, a las que no desautorizarán en su escalada sangrienta. Al margen de los dos grandes polos mencionados y rechazando la lucha armada, ESEI, agrupación socialdemócrata compuesta sobre todo por intelectuales, firmante también del Pacto Autonómico y detentadora de un acta -senador Gregorio Monreal- tiene sus días contados.