Painters

Crespo Lafuente, Ildefonso

El pintor, decorador y muralista Ildefonso Crespo, hermano de Fausto, nacido el 23 de enero de 1898 en Pamplona. Fallece en Vitoria el 12 de agosto de 1985, a la edad de ochenta y siete años.

En Pamplona se hallaba destinado por entonces el cabeza de familia, músico militar de profesión. Transcurrido un tiempo, el matrimonio retornó con sus dos hijos a Vitoria, de donde era natural la madre, Soledad Lafuente, alumbrando otros seis vástagos más. Estudió Ildefonso, al igual que su hermano mayor, en la Escuela de Artes y Oficios, en el Campillo, con el maestro Ignacio Díaz Olano.

Profesionalmente, Ildefonso Crespo se orientó hacia los trabajos de imitación artística en madera, mármol y otros materiales, situándose al frente del taller Pintura Crespo desde 1917 hasta el final de la guerra civil. Tras la contienda amplía horizontes laborales en Madrid junto a Fausto, que ya llevaba unos años avecindado a orillas del Manzanares. Consolida su formación artística en el estudio de Eduardo Chicharro, incidiendo como éste en el esmero por el dibujo. También, como ocurría con el profesor madrileño, se siente cómodo en el manejo del color y entre composiciones de gran formato.

Debido a sus numerosos encargos, regresa muy a menudo a Vitoria, ciudad de la que nunca se desvincula. Así, en 1947, proyecta la decoración para la embocadura del Teatro Florida. En 1951 se ocupa del vestíbulo del ya desaparecido cine Gran Cinema Vesa. De sus manos salieron también los fondos decorativos del popular safari que el empresario Juan Arregui Garay poseía en uno de los edificios anejos a su fábrica del polígono industrial de Gamarra.

Asimismo diseñó murales para la Confitería Goya, de la calle de Dato, para la perfumería Ibarrondo, de la calle de Independencia, y para el Colegio Virgen Niña, en el Paseo de Fray Francisco. Decoró también varias cafeterías vitorianas, entre ellas, Dakar, en la calle San Prudencio, y Nápoli, en la calle Manuel Iradier, así como el comedor del restaurante La Andresa. En 1975 fija definitivamente el domicilio en Vitoria para vivir con placidez la última etapa de su existencia.

Ya jubilado, libre de compromisos laborales, se entrega a los pinceles ejecutando una aceptable producción de cuadros. De todos modos, nunca dejó de pintar con el caballete, ya que se conservan obras de muy diferentes etapas. Únicamente celebró dos exposiciones individuales. La primera fue en enero de 1974, que compartió con su sobrino el decorador Jesús Crespo, aconteciendo la segunda en julio de 1977.

En esta segunda muestra colgó paisajes de Aramaiona, vistas y rincones de la capital alavesa, flores y bodegones, tal como nos recuerda Eduardo Martínez en el catálogo que redactó con motivo del homenaje que la Fundación Caja Vital dispensó en enero de 1999 tanto a Ildefonso como a Fausto Crespo.

Además de los temas de paisaje, flores y naturalezas muertas, géneros recurrentes a lo largo de toda su ejecutoria, Ildefonso trazó también retratos de sus seres más queridos, de su padre, de su mujer, Simona Sáinz de Cortázar, y de sus dos hijas, Raquel y Olga. Los desnudos colectivos de mujeres, niños y personas de diferentes razas atrajeron igualmente su atención. El último lienzo que pintó, fechado un año antes de morir, abordaba el asunto de Las tres razas.

Posee, asimismo, cuadros de impronta simbolista, como la serie de grandes dimensiones dedicada a la Vida humana; compuso varias escenas religiosas y pergeñó copias de las obras de los grandes maestros del pasado (Leonardo, Rubens, Hals, Murillo, Goya...).

  • MARTÍNEZ, Eduardo: Catálogo Exposición Homenaje a Fausto Crespo-Ildefonso Crespo, Sala Luis de Ajuria, Fundación Caja Vital Kutxa, Vitoria-Gasteiz, 4-21 de enero, 1999.