Monarchy and Nobility

Alfonso XII

Rey de España (1857-1885).

Hijo de Isabel II a la que Pedro de Egaña, Diputado General de Álava, en 1853 entregó uno de los velos de San Fausto de Bujanda para curar de su infertilidad. Destronada su madre, por la Revolución de Septiembre de 1868, pasó al exilio, donde en 1870 Isabel II renunció a sus derechos dinásticos a favor de su hijo. Abdicado Amadeo I de Saboya y fracasada la I República española, el general Martínez Campos se pronunció, en Sagunto el 28 de diciembre de 1874, a favor de la Restauración borbónica, pronunciamiento que, a pesar de no contar con el beneplácito de Canovas de Castillo cabeza de Ministerio-Regencia. A los pocos días Alfonso XII participó personalmente en la ofensiva de los tres cuerpos del Ejército liberal, mandados por Moriones, Primo de Rivera y Despujol, contra las fuerzas carlistas, dirigidas por Mendiri, que se extendían desde Montesquinza hasta la Valdorba. Como decía una canción carlista, el 3 de febrero de 1875, Alfonso XII estuvo en un tras de ser apresado, herido o muerto por una partida carlista junto a la ermita de S. Cristóbal de Lácar.

El 18 de febrero de 1876, Alfonso XII se hizo cargo en Bergara de la jefatura de los dos ejércitos liberales, el de la derecha (Navarra) y el de la izquierda (Vascongadas y Burgos). El Rey Pacificador entró al poco tiempo en Tolosa, Hernani, San Sebastián (donde fue clamorosamente acogido), Pamplona, Estella, Logroño, Vitoria, Durango y Bilbao, viviendo días de gloria al acabar la segunda Guerra carlista. Otorgó los marquesados de Estella, Peña-Plata, Oroquieta, Oria e Irún a los victoriosos generales Primo de Rivera, Blanco, Moriones, Loma y La Serna respectivamente.

Tras haber sido aprobada la Constitución de 1876 y siendo Cánovas del Castillo, presidente del Consejo de Ministros, Alfonso XII sancionó la Ley de 21 de julio de 1876, reformadora para unos y abolitoria para otros, de los fueros vascongados. Posteriormente, por Real Decreto, se instaurarían los Conciertos económicos de las Vascongadas y se equipararían, en cuanto a su elección, las Diputaciones de esas provincias con las otras tres provincias.

Alfonso XII se casó, en noviembre de 1879 y en segundas nupcias, con María Cristina de Hasburgo-Lorena, futura Reina-Regente y asidua visitante de San Sebastián.

  • FERNÁNDEZ ALMAGRO, Melchor: Historia política de la España contemporánea, tomo I, Madrid. Alianza Editorial, 1968.