Military

Urbina, Luis de

Militar, nacido en Vitoria el 11 de octubre de 1721. Murió el 8 de febrero de 1799.

Hermano de Juan Manuel de Urbina. Salió para Cádiz en 1737 siendo admitido como guardia-marina. En 1740 fue promovido para Alférez de Fragata y, ya al año siguiente, a Teniente de Capitán del regimiento de infantería de Guadalajara, con el que pasa a Italia en 1742, tomando parte en la batalla de Campo Santo y en la sorpresa de Veletri. El Rey le hizo gracia del empleo de Capitán en el regimiento de Cantabria y en 1745 de Capitán Comandante del regimiento de Sevilla con grado y sueldo de Teniente Coronel. En 1750 pasa a Orán cuyo Gobierno asume por ausencia de su titular. Más tarde pasa a Pamplona como Teniente Coronel restaurando la disciplina y orden del regimiento que se le había encomendado. En vista de ello le mandó el Rey para que arreglase las fábricas de armas de Plasencia y Tolosa y las de aceros de Mondragón lo que le supuso tres años de intenso trabajo. En ese tiempo arregló la nueva construcción del fusil y bayoneta, logrando una mayor perfección en la fabricación del acero.

Así mismo se le encomendó arreglar el asiento de armas de la Compañía de Caracas y verificar un ajuste de precios. Otros nuevo encargo fue la plantificación de la fábrica de espadas de Toledo mereciendo la visita personal de Carlos III, quien aprobó la calidad de las espadas, conceptuándola como las mejores de Europa. Urbina tuvo que fabricar exprofeso 12 de ellas para regalar a otros tantos monarcas. De inmediato se le encomienda ahora el nuevo uso y ejercicio de las armas de infantería, a la prusiana, lográndolo con la colaboración de varios oficiales. En 1761 se le encarga la recepción de levas y quintas en la Mancha, Extremadura y Toledo con arreglo a la nueva instrucción. En 1762 se había declarado la guerra con Inglaterra y Portugal y con ese motivo se incorporó con su regimiento de Sevilla al ejército, dándosele la misión de penetrar en Almeida con 500 hombres a su cargo.

Entró a media noche y se introdujo en los arrabales donde tenía sus principales medios de subsistencia la plaza, así de hornos para el pan, como de ganados y logró quemarlos y destruirlos llevando como prisioneros a todos sus habitantes, con más de mil cabezas de ganado. Por esta acción le nombró el Rey Brigadier de los Reales ejércitos. En 1769 pasó con su regimiento a la Habana y a su vuelta se le ascendió a Mariscal de Campo. En 1775 fue a la expedición de Argel donde fue herido en una pierna. Nuevo ascenso, ahora, de Teniente General de los Reales ejércitos. Estuvo también de Fiscal Militar durante 14 años. A fines de 1790 se le destinó para defender la plaza de Ceuta que se hallaba sitiada por el Emperador de Marruecos a quien derrotó tres veces consecutivas. Por ello recibió nuevos honores y el título de Capitán General de Provincia, que lo fue, en concreto, de Valencia que luchaba contra los franceses. Fue también Capitán General del reino de Murcia y Presidente de su Real Audiencia. Ref. Joaquín José de Landázuri: Varones ilustres Alaveses, Vitoria, 1799.