Pintores

Ameztoy Olasagasti, Vicente

Pintor guipuzcoano nacido en San Sebastián el 30 de enero de 1946. Fallecido en Villabona (Gipuzkoa) el 6 de noviembre de 2001.

Estudió con el pintor Ascensio Martiarena. Sobrino del también pintor Jesús Olasagasti, a los quince años puede decirse que ya es conocido; obtiene el Tercer Premio del Certamen de Artes Plásticas (1961), su paleta se aclara dando paso a una serie de figuras humanas tenues y luminosas, caballos blancos, payasos, muchachas, etc. Ameztoy se da a conocer como un artista lleno de imaginación con marcada tendencia a lo mágico. Las pinturas de esta época recuerdan el mundo adolescente de Alain Fournier.

Con los años el lienzo se oscurece nuevamente sin perder por ello la línea tendente a lo mágico que es como una constante íntima de este joven pintor. Las muchachas de ojos profundos y húmedos reaparecen esporádicamente en pinturas y en dibujos, las figuras, un tanto fantasmagóricas y ajenas al mundo real de las necesidades, surgen entre veladuras bien matizadas y explosiones luminosas de naranjas y amarillos. Ameztoy maneja las trasparencias como un veterano arrancándoles gran cantidad de matices.

En 1962 obtiene el segundo premio en el Concurso de Navidad y un primer premio en 1963. Expone sin interrupción tanto colectiva como individualmente: en 1964 en la Galería Juana Mordó; en la exposición De Goya a nuestros tiempos, en la Galería Edurne de Madrid; y en la exposición colectiva del Castillo de Carlos V de Hondarribia. En 1965 presenta sus lienzos en la exposición individual del Festival de los dos Mundos de Spoleto (Italia). Al año siguiente obtiene el accésit al Premio de Pintura Vasca y al siguiente expone en las Galerías Barandiarán de San Sebastián. El último galardón lo obtiene en 1968: Segundo Premio del Certamen de Pintura Vasca.

Sigue exponiendo habitualmente en la década de los 70 y más esporádicamente en los 80 y 90. En 1990 colabora en la dirección artística de Vacas de Julio Medem y en 1991, diseña el vestuario y la escenografía de la pastoral Pantzart.

A su muerte dejó inconclusa su última gran obra, la decoración de la capilla de las bodegas Remelluri de Labastida, en la que llevaba trabajando desde 1993. En abril de 2004, El Museo de Bellas Artes de Bilbao adquiere su obra La boca, de 1979, considerada como una de las obras más emblemáticas de la producción de Ameztoy.